Siempre la ética estará en crisis, porque si no está en crisis es que somos demasiado autocomplacientes y pensamos que ya se han realizado todos los ideales, lo cual sería lo más negativo que nos podría ocurrir.
Al principio de las plagas, y cuando han terminado, se hace siempre algo de retórica. [..] Es en el mismo momento de la desgracia cuando uno se acostumbra a la verdad, es decir, al silencio.