Es propio del amor si es verdadero, compendiar en un ser el mundo entero.
Todo en amor es triste, mas, triste y todo, es lo mejor que existe.
La libertad no consiste en hacer lo que se quiere, sino en hacer lo que se debe.
Y es que en este mundo traidor, no hay verdad ni mentira: todo es según el cristal con que se mira.
Las preocupaciones se pierden con el tiempo.
Saben bien los amantes instruidos que quiere decir "sí" tres "no" seguidos.