El amor es la única cosa de este mundo que no quiere más comprador que a sí mismo.
La diversión es como un seguro, cuanto más viejo eres más te cuesta.
No existe la casualidad, y lo que se nos presenta como azar surge de las fuentes más profundas.
Quien vive entre los deleites y los vicios ha de expiarlos luego con la humillación y la miseria.
Cuanto más alto coloque el hombre su meta, tanto más crecerá.
La libertad existe tan sólo en la tierra de los sueños.
En lo que parecemos, todos tenemos un juez; en lo que somos, nadie nos juzga.
La palabra es libre; la acción muda; la obediencia ciega.
¿Qué es la mayoría? La mayoría es un absurdo: la inteligencia ha sido siempre de los pocos.