La cosa tiene gracia porque se supone que la diversidad es lo más moderno que hay, pero si uno toma una muestra de ciudadanos, nunca lo diría.
Hoy todo el mundo parece idéntico porque nadie tiene tiempo para diferenciarse, ni siquiera tiene tiempo para comprar.
Las máquinas sólo pueden ser producto de nuestro ser, si examinamos las máquinas que construimos y la cosas que metemos en ellas, tenemos un dato único y fiable de cómo estamos evolucionando.
Sería deseable que todo el que quisiera presentar su candidatura para un cargo pudiera explicar por qué quiere ser candidato. El deseo de ser candidato parece, por sí mismo, razón suficiente para la exclusión.
Los ordenadores te enseñan algo importante, y es que no tiene sentido recordarlo todo. Lo importante es ser capaz de encontrar cosas.