La paz no es la ausencia de guerra, es una virtud, un estado de la mente, una disposición a la benevolencia, la confianza y la justicia.
No me arrepiento de nada. El que se arrepiente de lo que ha hecho es doblemente miserable.
Si no quieres repetir el pasado, estúdialo.
Sólo es libre aquello que existe por las necesidades de su propia naturaleza y cuyos actos se originan exclusivamente dentro de sí.
Comprender es el principio de aprobar.
La experiencia nos ha demostrado que a la persona no le resulta nada más difícil de dominar que su lengua.
La actividad más importante que un ser humano puede lograr es aprender para entender, porque entender es ser libre.